Previous Main Table of Content Print PDF Next
Sección 8: Gestión Sostenible
8.2 Medidas para ahorrar recursos e impactos

8.2.5. Comedor, salones y estancias comunes

En cuanto al mobiliario, si es posible, ha de optarse por la compra de muebles antiguos típicos de la comarca donde se encuentra el alojamiento rural, en el mercado los podemos encontrar en muy buen estado y a bajo precio. La compra de estos muebles contribuye de forma importante a la reutilización y evita el uso de nuevos recursos, en este caso la madera.

Es importante que los muebles:

·Si están fabricados en madera o productos derivados de la madera, que éstos provengan de bosques donde se realice una Gestión Forestal Sostenible. Esta seguridad nos la dan los logotipos de Certificación Forestal de Gestión Maderera Sostenible como la del Consejo de Manejo Forestal (conocido por las siglas inglesas FSC).

Dentro del estilo de decoración de cada establecimiento, siempre es recomendable utilizar materiales naturales, fabricados en el ámbito local y que encajen con la decoración típica de la zona. Si se está pensando en renovar la decoración del local, sobre todo en establecimientos de turismo rural, se puede estudiar la posibilidad de emplear una de tipo rústico aprovechando las ferias locales de decoración tradicional. Que se adquieran en lugares cercanos al alojamiento rural, para evitar transportar los muebles desde grandes distancias. Estos artículos son muy pesados y voluminosos, por lo que en su traslado se consume gran cantidad de combustible (que genera la consiguiente contaminación atmosférica).

Tampoco es recomendable cubrir con madera paredes y techos, existen en el mercado paneles de recubrimiento artificiales de alta calidad y aspecto muy similar en cuya fabricación no es necesario emplear la madera como materia prima.

Sea cual sea el estilo decorativo de las estancias, siempre se debe hacer una distribución del mobiliario tal que se aprovechen al máximo el espacio y la luz natural. La regla de oro es: aprovechar la luz solar y evitar en lo posible la artificial. Siguiendo este principio se ahorra dinero y energía, consiguiendo una iluminación clara, intensa y natural, aunque para ello puede ser necesario abrir ventanales en zonas estratégicas.

En cuanto a la luz artificial, las bombillas han de ser de bajo consumo y larga duración, instalando tubos fluorescentes en aquellos lugares donde se prevean largos periodos de funcionamiento. Los salones, salas de reuniones y comedores se pueden dotar de interruptores con regulador de intensidad para adaptar la iluminación a las necesidades de cada momento.

¡RECUERDE! Si el clima de la zona es muy frío, se pueden recubrir las paredes de salones y comedores con tapices fabricados con fibras naturales. De esta forma tendremos un aislamiento térmico en las paredes que limitará las pérdidas de calor hacia el exterior, con el consiguiente ahorro en calefacción.

Previous 8.2.4. Buenas Prácticas Ambientales en el uso eficiente de la energía           8.3. Otros aspectos de sostenibilidad: RSC e integración local Next